"Que tú no merecías estar con alguien como yo, porque solo puedes y quieres adorarte a ti mismo; que yo no merecía estar con alguien como tú, porque no supiste valorarme, ni verme, ni sentirme, ni amarme; que hay cosas muchísimo peores que esto; que ahora no lo veo, pero todo irá mejor sin ti; que esto me va a hacer madurar; que esto era inevitable, que tarde o temprano iba a suceder (todos lo veíais, incluido tu, desincluida yo); que blablablabla..." Voces que oigo continuamente a mi alrededor, incesantes, incisivas, torturadoras, mientras yo solo me repito, aún sabiendo que todo lo anterior es tan cierto como que no me llamo Lux, que yo me había acostumbrado a ese sin-sentido que era estar a tu lado siendo siempre la segunda, que yo te quería así, porque te acepté así des del principio, y que yo solo quiero estar contigo y dejar de oír todas esas putas voces que me recuerdan lo imbécil que he sido y lo imbécil que estoy siendo por escribir estas sandeces.
¿Sabes lo peor? Que por mucho que duela - y duele mucho, mucho - al final las voces tienen razón... Ojalá fuera más fácil.
ReplyDeleteMuchísimo ánimo, preciosa <3 si quieres hablar ya sabes que estoy por el fb!